Friday, July 04, 2008

Chicken go!

Antes, cuando al menos contaba con la belleza que la juventud otorga, tenía yo ciertos hábitos alimenticios que pocos lograban entender (y que terminaron por mermar áquello que algunos autores enlistan como la belleza de juventud: mejillas rozagantes, brillo en los ojos, etc,) de hecho creo que solo una persona de mi familia podría hacerlo y es un tío que tiene esquizofrenia y que en su juventud mostró entre todos sus síntomas esta peculiaridad alimenticia, que es la siguiente: durante temporadas largas muy largas comer solo una cosa, tarde mañana y noche, entre comidas, como postre, como sea. Dice mi mamá que tío David tuvo etapas de comer durante semanas solo lonches de huevo con chorizo, luego cambió a chuletas, luego carne molida con tomate y cebolla y así ad infinitum. La verdad es que yo más mediocremente empecé con (verguenza) una ingestión escandalosa de Choco Krispis (!!), me obsesioné de tal manera que recuerdo estar en la escuela con síntomas de abstinencia parecidos a los que produce el alcohol: sudoración, ansiedad, desesperación, poca o nula capacidad de concentración. Solo pensaba en llegar a mi casa a comer sin ton ni son cantidades exhorbitantes de choco krispis, me acababa cajas enteras de una sola sentada, ante la mirada azorada ( y luego asqueada) de mis atribulados padres. En ese entonces yo tenía 13 ó 14 años (misma edad en que tío David comenzó con este síntoma, entre muchos más, aclaro, además mi mamá opina que no necesariamente era un síntoma de la enfermedad, pero bueh, tal vez para tranquilizarse a sí misma) y huelga decir que gracias a mi nuevo vicio bajé tanto de peso, agarré un extraño color verdoso (cual anti-heroína de Servidumbre Humana, La verdosa Mildred) y con la mirada extraviada, las greñas de loca (eso siempre) ps daba un aspecto que producía miedo. Después de desmayarme varias veces comprendí que ese no era el camino y opté por comer a todas horas y exclusivamente: Flan!! Sí, de esos que preparas en casa, miles de veces no soporté dejar pasar el tiempo para que cuajara y me lo tomaba líquido y caliente!!! dios, el ser humano puede caer tan bajo a causa de sus vicios y debilidad ante las tentaciones del averno. Luego pasé a las avenas!! avena tarde mañana y noche....y luego sándwiches y luego pan con queso philadelphia....y así, hasta que terminé por parecer un hilacho sin forma y de ojos desmesurados.

Finalmente y luego de algunos coscorrones, jalones de greña, amonestaciones, virulentos episodios familiares que terminaban con un feroz lanzamiento de zapatos a mi cabeza, volví al redil y comencé a comer como la gente, sin por ello dejar de lado algún alimento que TODOS los días comía aunque ya solo adicional a la comida normal. Y luego dejé esas sandeces para después, pasaron años en los que no volví a caer en las garras del vicio y aunque tenía mis comidas predilectas no me obsesionaba.

Pero ahora......me siento de nuevo presa de una incipiente obsesión, y es tan vergonzoso y tan intempestivo este nuevo "amor" que no hallo como hacer para pasar de largo ante la tentación, para no volver a convertirme en un hilacho mal alimentado, pero oh, son tan suavecitos, con un avinagrado sabor, con una consistencia deliciosa, no muy agraciados a simple vista pero tan suculentos, sí, mi nueva adicción son: los cueritos en vinagre....o.O

Bien dicen que los vicios aunque los creas superados siempre están latentes en tu siquis más profunda, y algún día vuelven a emerger con más fuerza que antes.

No somos nada ante la vida, simples mortales que pasamos un breve tiempo en la tierra para volvernos de nuevo polvo cósmico como antes de nacer ya lo éramos...er..ejem...lo que me hace pensar en que antes de morir y convertirme en polvo debería comer unos cueritos con vinagre, digo, pa no irme con las ganas, verdad??

Ahí vengo...slurp!

4 comments:

Exquisita Criatura said...

los cueritos en vinagre no son vicio.

yo puedo dejarlos cuando quiera!!!

Anonymous said...

jaja lo confieso, yo tambien fui presa de los chococrispis en alguna etapa de mi vida, lo malo es que se acaban pronto.

ĭçoŋoçlast@.·´¯`·.¸ said...

Por lo visto es un mal de familia. No se si sea genético o psicológico pero ninguna manía obsesiva es recomendable.

Espero que en tu vida sexual si seas un poco mas variada...por tu bien y el de tu pareja.

santo said...

Orale Abe pos como no te ibas a poner flaca y ojerosa si con puro choko krispis imaginate ya mero y salias caminando como el elefantito jejeje y pues si hay que comer algo que nos gusta pero no en cantidades industriales espero y ya estes mejor y nada mas sabories los cueritos porque si son sabrosos pero leve leve la pezuña
saludines :)